jueves, 8 de abril de 2010

La revuelta de la sombra espástica


¿Y cómo se supone que quieres que sea
la pinche revuelta de la sombra espástica?

¿Sangre saltando por las coladeras y pueriles presas de atrofias musculares?

¿Festín de cartílagos recién quebrados
ante los ojos endemoniados de miles de hermanos?

¿Silbidos en el vacío que olvidaron hace tiempo la melodía?

¿Ojos hacinados
supurando su ictericia en vagones del metro
que siguen andando?


¡Insalobres pasillos,
vahos violentos de gasolina,
vulgares infecciones y tumores ostentosos,
reinando revoltosos las tribus de inmundicia!

¡Y cómo se supone que quieres que sea la pinche revuelta de la sombra espástica!




(Este salió en uno de mis periplos metrobuseros. Creo no ser el único que se vuelve por lo menos misántropo entre tanta gente. Por suerte, existen formas pacíficas de hacer catársis.)
[Fin de la nota. Perdón, Hugo, si estás leyendo esto]

5 comentarios:

Ramis dijo...

Éste está genial. Grotesco, pero genial. ¿Qué significan los signos que están debajo?

Juan Carlos D. dijo...

Jaja, no había entendido lo de los signos. Ya lo corregí :P

Le Niais dijo...

Jajajajajaja sensación agradable la de ser tu Superyó. Mal niño, buen poema.

Ramis dijo...

Ajá!!! Entonces no eran signos extraños! Jajaja xDD... Me gustó aún más luego de leer tu comentario de autor.

Juan Carlos D. dijo...

Merde!